Si llevas un tiempo en el mundo del vaping, te darás cuenta que hay muchas personas que preguntan la diferencia con un cigarro y si realmente el vapor que estás inhalando es tóxico.
Algunas personas simplemente les da curiosidad, a otras les preocupa la salud, pues es bien sabido que el fumador pasivo, al igual que el fumador regular, tiene consecuencias a la salud.
La Definición de Fumar
Según nuestro diccionario de Wikipedia, fumar es una práctica donde una sustancia (comúnmente tabaco, pero también puede ser opio o mariguana, entre otras) es quemada y acto seguido se prueba o inhala su humo, principalmente debido a que a través de la combustión se desprenden las sustancias activas (como la nicotina), que son absorbidas por el cuerpo a través de los pulmones.
Quemar una sustancia altera drásticamente su composición química. El humo está compuesto de moléculas visibles de carbón, moléculas de la sustancia quemada, y otras sustancias de la combustión. En otras palabras, inhalar algo que se encuentra prendido, tiene muchas sustancias.
La Definición de Vapear
Según Wikipedia, el vapor, es una sustancia en la fase de gas a una temperatura más baja que su temperatura crítica. Lo cuál significa que el vapor puede ser condensado a líquido, aumentando la presión sin reducir la temperatura.
En otras palabras, vaporizar un líquido, altera su estado, pero no compromete las moléculas de su fase original del estado líquido.
Técnicamente, lo que producimos cuando vapeamos no es vapor, sino aerosol. Wikipedia define el aerosol como una suspensión de partículas de líquido en el aire o en otro gas.
El e-liquid, cuando se vapea, se transforma en partículas suspendidas en el aire y caen al suelo rápidamente. Debido a que las partículas son líquidas, a diferencia de las partículas solidas de la combustión, tienen mucho menos riesgo para los pulmones y para el sistema cardiovascular.
¿Cuál es la diferencia real entre fumar y vapear?
Prender un cigarro, automáticamente genera humo por combustión, mientras encender un cigarro electrónico, produce vapor (aerosol). Afuera de las similitudes visuales que tienen ambos, el humo y el vapor no tienen realmente nada en común. Son muy distintos en composición y se comportan de formas distintas.
Este es el resumen de su comportamiento:
Composición
Cuando se trata sobre tabaco o e-liquid, lo único que ambos tienen en común es la nicotina. El cigarro tradicional contiene miles de químicos, de los cuales sabemos que al menos 70 son cancerígenos.
Aunque los vapers no producen vapor líquido, ya que tienen glicerina, propilenglicol, nicotina y saborizantes naturales, a excepción de la nicotina, todo lo que incluye un e-liquid es seguro para su ingesta y de grado farmacéutico.
Es seguro para ingesta, para inhalarlo aún no conocemos la seguridad exacta, pero tampoco existe prueba de riesgo.
Olor
El olor a cigarro, se puede quedar impregnado en la ropa o en un cuarto por un largo periodo de tiempo. Un fumador no lo nota fácilmente, pero un tercero lo nota de inmediato. El olor puede quedarse en un cuarto por horas.
Las nubes de vapor son más densas y se disipan más lento que el humo del cigarro, sin embargo, el olor no se queda impregnado y desaparece rápidamente.
Residuos
El fumar, eventualmente provoca daños a pintura, muebles y decoración. Es bien sabido, que los residuos del cigarro son tan tóxicos que manchan todo tipo de materiales, el ejemplo más claro es los dientes.
Otras formas de combustión que contienen monoxido de carbono, son lo suficientemente fuertes para cambiar color de paredes blancas a color amarillo.
El PG y VG de los vapers, se disipa fácilmente y no tiene suficientes residuos como para alterar colores.
Temperatura
La temperatura de un cigarro llega hasta 900 grados C° cuando se fuma. Mientras el humo, alcanza la temperatura ambiente rápidamente después de exhalarse. Mientras más cerca llegas al filtro, la temperatura puede aumentar más. El peligro a los pulmones es la alta temperatura a la cual se inhala.
Con un vaper, la resistencia que vaporiza el e-liquid puede alcanzar temperaturas de hasta 200 grados C°. Como resultado, el vapor que se exhala es mucho más fresco, minimizando el daño a la hora de inhalarlo.
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Referencia (Artículo original):